martes, 18 de septiembre de 2007

Inocencia infantil


Empujo mi barco de madera, no me importa el peligro, no me importa la gente. Lo impulso hacia el peligroso centro del estanque. Estoy seguro, la suerte no me será esquiva. El viento lo llevará a la otra orilla,... algo así debió pensar Cristobal Colón hace 518 años. ¡Cómo pasa el tiempo!